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El maletero es el lugar donde hemos de depositar debidamente asegurados los artículos que vamos a transportar en el coche

La compra de los regalos de Navidad y Reyes trae consigo que los meses de diciembre y enero sean considerados como uno de los periodos con mayor actividad comercial del año. Como en época de rebajas o en otras celebraciones puntuales, como el Black Friday, es habitual ver en estas fechas por la calle a gente cargada con bolsas y paquetes con los obsequios que han adquirido para regalar a sus familiares y amigos.

Aunque las autoridades aconsejan utilizar el transporte público para evitar congestiones de tráfico, aún son muchas las personas que prefieren ir de compras en coche para no tener que cargar con los regalos de vuelta a casa. En algunos casos, no obstante, el uso del vehículo privado resulta justificado cuando se trata de transportar objetos de dimensiones considerables, como un televisor, una bicicleta o un patinete eléctrico, ya que son difíciles de llevar en autobús o metro.

Colocar los objetos, por pequeños que sean, sueltos en los asientos es una imprudencia 

A la hora de transportar en coche los artículos comprados hemos de ser muy cuidadosos para cumplir con la normativa. Uno de los errores más frecuentes que todos, sin excepción, hemos cometido alguna vez tiene que ver con la colocación de los bultos que cargamos en el vehículo. Si bien es cierto que debemos depositarlos en el maletero distribuyéndolos de forma organizada, como luego veremos, es muy habitual que por comodidad los dejemos sueltos dentro del habitáculo, encima de la bandeja trasera o sobre los asientos.

Transportar cualquier objeto suelto, por pequeño que sea, en el coche contraviene las normas, aunque es una infracción que no suele ser sancionada por los agentes de tráfico. Sin embargo, el artículo 14 del Reglamento General de Circulación establece que los objetos transportados no deben “arrastrar, caer total o parcialmente o desplazarse de manera peligrosa” ni tampoco “comprometer la estabilidad del vehículo”. Dicho de otro modo, los bultos que llevamos en el coche deben estar bien sujetados y colocados de forma estratégica.

La red para sujetar la carga en el maletero es un accesorio práctico para evitar que los bultos se desplacen durante la marcha 

Por norma general, debemos depositar todos los bultos que transportamos en el maletero, incluso los más ligeros. Los objetos más pesados y voluminosos los colocaremos junto al respaldo de los asientos traseros para mantener el centro de gravedad del coche equilibrado. De este modo no vamos a poner en peligro la estabilidad del automóvil. El resto de los objetos los pondremos encima repartiendo su peso en el portaequipajes de forma proporcional.

El RACE aconseja sujetar la carga a los puntos de amarre del maletero con sujeciones o redes. También recomienda cubrir con una manta todo lo que pueda convertirse en objetos cortantes, como el cristal, para evitar que estallen y salgan disparados.

Sin embargo, como decíamos anteriormente, muchas veces cometemos el error de transportar objetos sueltos en los asientos. Si el maletero está lleno y necesitamos el espacio del habitáculo del coche para colocar la carga deberemos tener en cuenta que los objetos más voluminosos tienen que ir sujetados con redes o cintas, o abrocharlos con los cinturones. Por lo que respecta a los artículos de dimensiones más reducidas, como un teléfono móvil, los colocaremos en la guantera o en el hueco que hay entre los asientos.

Al asegurar la carga evitaremos que los objetos salgan proyectados hacia adelante en caso de accidente o de frenazo brusco. Algo que es muy importante si tenemos en cuenta que cualquier objeto o pasajero que viaje suelto en un coche continúa su marcha hacia adelante por el efecto de la inercia y multiplica de forma exponencial la fuerza con la que golpea a los ocupantes de los asientos delanteros. Es lo que se conoce como 'efecto elefante'.

Por ejemplo, un teléfono móvil de 110 gramos acabaría impactando a los pasajeros de los asientos delanteros con el peso de un gallo (3,9 kg) a 50 km/h o de un perro de la raza cocker spaniel (12,5 kg) a 90 km/h, como explica gráficamente la Dirección General de Tráfico (DGT) en su cuenta oficial de Twitter.

Las bicicletas siguen siendo uno de los regalos más deseados por los niños en Navidad y Reyes. Para transportar una bici en el coche la colocaremos en el maletero sujetándola convenientemente para que no se mueva durante el viaje. También existen diferentes tipos de dispositivos para transportar bicicletas en un coche: de techo, de enganche, sobre el portón trasero y de remolque. Si la bici sobresale por detrás deberemos señalizarlo como establece la normativa.

En el caso de que el tamaño de la bicicleta sea inferior al ancho del vehículo (incluyendo espejos) deberemos llevar una señal V-20 situado en el extremo de la carga y perpendicular al eje del automóvil. Cuando la carga ocupa todo la parte posterior del vehículo deberemos llevar dos señales V-20, una en cada extremo dela carga. En aquellos casos de que la carga sobresale de la parte trasera del turismo está prohibido transportarla.

Las bicicletas siguen siendo uno de los regalos que más piden los niños para Navidad y Reyes 

Al colocar paquetes muy voluminosos sobre los asientos debemos tener en cuenta que “no haya interferencia entre el conductor y cualquiera de ellos”, como indica el artículo 18 del Reglamento General de Circulación (RGC). En el caso de llevar los objetos en los asientos traseros, estos no deben comprometer la visión que ofrece la luneta trasera.

Al depositar los bultos en el asiento del copiloto, hemos de asegurarnos de que no interfieran con el espejo retrovisor derecho para que no dificulten las maniobras de adelantamiento o el estacionamiento.

Transportar en el habitáculo un objeto de gran volumen puede interferir en la conducción. Por esta razón debemos asegurarnos de que los paquetes no limitan los movimientos del conductor ni comprometen su habilidad al volante y su capacidad de reacción. De este modo viajaremos seguros y evitaremos contravenir el citado artículo 18 del RGC ahorrándonos así una sanción tipificada como grave que comporta una multa de 200 euros.

Debemos evitar que los artículos que transportamos en el coche limiten el campo de vición del conductor 

No solo hemos de poner nuestra atención sobre los paquetes más voluminosos. Por pequeño que sea el objeto que transportamos, si no lo depositamos en un lugar seguro (la guantera o el hueco que habitualmente hay entre los asientos) puede desplazarse en las pendientes hasta situarse bajo los pedales del conductor. En una situación como esta existe el peligro de que se pueda llegar a bloquear el pedalier y provocar la pérdida del control del vehículo.

Al circular con exceso de carga el comportamiento del coche cambia. Un vehículo cargado necesita mayor distancia de frenada y la experiencia de conducción no es la misma. El vehículo pierde agilidad en carretera al disminuir la estabilidad y el equilibrio y aumenta el consumo de combustible o reduce su autonomía en caso de ser eléctrico.

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